El tren de vapor vuelve para que no se olvide la historia ferroviaria de Asturias
La locomotora VA 8 atravesará cinco concejos en el recorrido más largo de estas características en España, para atracción de vecinos, turistas y entusiastas nacionales e internacionales de los trenes históricos
La locomotora VA 8, que se dedicó a mover muchas miles de toneladas de carbón entre el valle de Turón y el puerto de San Esteban de Pravia, volverá a echar vapor para cubrir el trayecto más largo de un tren histórico en España: los 55 kilómetros que separan Trubia (Oviedo) de Collanzo (Aller).
La Asociación Cultural y Minera Santa Bárbara de Mieres, cuando propuso en 2019 recuperar este tren histórico para realizar viajes con pasajeros atravesando cinco concejos asturianos, tenía claro que con esta actuación se dignificaba esa historia. «Se hace justicia a la historia ferroviaria de Asturias, que tiene una de las mejores redes de ferrocarril de Europa. Esta es la última oportunidad que tenemos de dignificar nuestra historia ferroviaria», reitera José Luis Soto, de la sección de arqueología industrial de la asociación de Santa Bárbara, en la que valoran el paso dado recientemente para que este proyecto eche andar este mismo año.
«Estamos contentos con que se haya visto la potencialidad del proyecto, que pasa por cinco concejos y hace una cohesión territorial importante», apunta Soto, valorando también lo importante que es que en Oviedo, Mieres, Aller, Morcín y Ribera de Arriba hayan llegado a un acuerdo para poner en marcha un proyecto que la asociación tiene minuciosamente descrito para demostrar que no solo es viable y sostenible, sino que también supondrá un revulsivo en la zona tanto social como económico por su atractivo turístico y cultural.
La locomotora de vapor número 8 del Vasco Asturiano es una de las joyas del patrimonio ferroviario asturiano. Es la última locomotora de valor de vía estrecha construida en España para un ferrocarril público y de las pocas que quedan para recordar lo que fueron los ferrocarriles en la cornisa cantábrica. Fue despachada por Babcock & Wilcox en 1958, siete años después de ser encargada, y costó 2.477 pesetas.
Era una copia de una serie que se había construido en la Fábrica de Armas de Trubia, en concreto de la número 8 del Ferrocarril de León a Gijón, y conservó el ocho, siendo asignada al arrastre de trenes de carbón entre Figaredo y el puerto de San Esteban de Pravia. Cuando el vapor quedó relegado por la irrupción del diésel, la VA 8 se libró del desguace y se mantuvo en servicio en el depósito de Figaredo.
El proyecto de la asociación incluye una propuesta de frecuencias, horarios y épocas del año para que el tren histórico preste servicio, que serían precisamente primavera y otoño para impulsar la desestacionalización del turismo en la zona. «Nuestra propuesta es una base para desarrollar el proyecto según las sugerencias de cada concejo». Por lo pronto, tras la reunión que mantenían el pasado lunes Renfe, el Principado y los ayuntamientos implicados, esta primavera se pondrá en pruebas en el trayecto con la previsión de que pueda ser una realidad a partir del próximo otoño.
Fuente: lavozdeasturias.es