El mantenimiento en la rampa de Pajares en mínimos históricos

El 19 de diciembre se produjo un descarrilo en un túnel próximo a Linares Congostinas (Puerto de Pajares), lo que originó un nuevo corte de la circulación por el puerto de Pajares, que se suma al resto de horas que Asturias se ha quedado sin conexión ferroviaria con la Meseta. En febrero un temporal de nieve cerró la vía por el puerto durante seis días. La nevada de octubre y el desplome de decenas de árboles sobre la traza hizo lo propio cinco días más. El día 3 de diciembre las piedras de una ladera cayeron sobre un tren de mercancías y la catenaria dejando sin servicio el paso por el puerto durante doce horas. El riesgo de desplome de dos rocas de enorme tamaño obligó a cortar el tráfico durante 60 más. Al final, en lo que va de año se han perdido horas de circulación que suman casi catorce días y medio.

En 2018 se han perdido más del triple de horas de circulación que en todo el año anterior. El cómputo incluye imponderables contra los que poco se puede hacer, como son las nevadas, sin embargo el resto de situaciones se pueden vincular con la falta de conservación.

El desembolso en la rampa de Pajares ha caído a mínimos históricos. Entre 2004 y 2009, el esfuerzo en el tramo Busdongo – Puente de los Fierros promedió los 0,9 millones al año. En el cuatrienio siguiente, la inversión fue de 1,08 millones. En 2016 y 2017 sin embargo el gasto quedó en alrededor de 135.000 euros cada año. Supone un recorte del 87,5% respecto al promedio marcado entre 2010 y 2014. La medida es coherente con el planteamiento de prescindir de la rampa una vez abra la variante de Pajares. Es el escenario que impulsa el Ministerio de Fomento, tras un reajuste en el proyecto de las vías de la variante que permitirá absorber todos los tráficos.

Fuente: elcomercio.es